Il bambino che contava le stelle

La poesía de las estrellas y los sueños de un niño

La canción "Il bambino che contava le stelle" del artista italiano Ultimo, nos sumerge en un viaje introspectivo y poético a través de la mirada de un niño que, a pesar de las contradicciones de la vida, mantiene la capacidad de soñar y la esperanza en el futuro. La letra refleja una serie de contrastes personales, como el desinterés por hablar pero el deseo de sentir, o el rechazo a estudiar pero la sed de conocimiento. Estas líneas sugieren una lucha interna entre lo que se espera de uno y lo que realmente se desea, una temática común en la juventud y en la búsqueda de la identidad personal.

El estribillo, con su repetición de números que van de lo simple a lo complejo, podría simbolizar la cuenta de los sueños o deseos, que aunque parezcan inalcanzables, se mantienen presentes en la mente del protagonista. La mención de las estrellas como metáfora de los sueños y aspiraciones es un recurso lírico que evoca la belleza y la inmensidad de lo que anhelamos. Además, el hecho de que el protagonista se identifique como el niño que contaba las estrellas nos habla de una inocencia y una pureza de intenciones que a menudo se pierden en la adultez.

La canción también aborda la idea de la resistencia personal y la lucha contra las expectativas sociales. El verso que menciona un árbol gigante donde el protagonista se detenía para 'volar con la mente' sugiere un escape de la realidad y la importancia de la imaginación como refugio. La luz en los ojos del niño, producto de la luz en su piel, es una imagen poderosa que refleja la idea de que la esperanza y la belleza interna son visibles externamente, y que a pesar de las dificultades, hay una luz que nunca se apaga.